Texto de Isabel Jiménez
Los «diamantes de sangre» son aquellos que fueron utilizados a través del contrabando para conseguir armas en los diferentes conflictos armados. Esta película se centra en el período de la guerra civil de Sierra Leona, en 1990. Narra una historia de desesperación y de lucha por la supervivencia, con la guerra como telón de fondo. Refleja la precariedad, las mafias, el contrabando de diamantes… que fomentan que esto ocurra. El trasfondo final es la realidad de los niños-soldado.
El nexo entre todos los protagonistas de la historia es un raro diamante rosa. Solomon Vandy (Djimon Hounsou) es obligado a trabajar en los campos de diamantes. Encuentra la piedra preciosa y la esconde, esperando utilizarla como vehículo de salvación, para él y para su hijo -interpretado por un debutante Kagiso Kuypers-, que ha sido secuestrado por las mafias y convertido en niño soldado. En el otro lado, Danny Archer (Leonardo DiCaprio), ex-contrabandista que anhela obtener el diamante como salvoconducto para salir del país. Y la tercera en discordia, May Bowen (Jennifer Connelly), periodista norteamericana que pretende desvelar las injusticias en torno al mercado de diamantes y que se une a los protagonistas masculinos en sus andanzas buscando la famosa piedra. Una búsqueda a través de territorio rebelde que convierte a este viaje en el más peligroso que han emprendido en su vida.
