Texto de Reyes M.
17 y 24 de octubre/14, 21, 25, 28 de noviembre de 2023. Sala Berlanga (C/Andrés Mellado, 53. Madrid)
Precio de la entrada: 3,50€
La Fundación SGAE presenta Teatro en la Berlanga, una muestra de dramaturgia contemporánea que concentra el tradicional Ciclo SGAE de Lecturas Dramatizadas. que tendrá lugar en la madrileña Sala Berlanga. Tras la lectura de todas las obras habrá un encuentro del equipo técnico y artístico de cada pieza con el público.
El ciclo comenzó en octubre con la lectura de fragmentos de las obras del X Laboratorio de Escritura Teatral de la Sgae y continuó con Vagos y maleantes de Juan Carlos Mestre y Celia Morán (XVI Certamen Internacional Leopoldo Alas Mínguez para textos LGTBIQA+). El 18 de noviembre podremos asistir a la lectura del Premio SGAE de Autoría 2022: Primera sangre de María Velasco (XXXI Premio SGAE de Teatro Jardiel Poncela), el 25 de noviembre de Mambrú volvió de la guerra de Carlos Labraña (XXIII Premio SGAE de Teatro Infantil) y el 14 de noviembre de La última función de Silvia K. de Laura Aparicio (IV Premio SGAE de Teatro Ana Diosdado para textos escritos por mujeres). El 21 de noviembre tendrá lugar el estreno absoluto de Del oso las yemas de Javier Ballesteros (Premio Max a Mejor autoría revelación 2023).
«La última función de Silvia K» de Laura Aparicio
14.11.2023/19.30 h. Sala Berlanga. Madrid. 3,50€. https://cine.entradas.com/cine/madrid/sala-berlanga/sesiones?date=2023-11-14
Incluimos este artículo en la sección de literatura con la esperanza de que pronto nos sirva para ilustrar el estreno del montaje en algún teatro del mundo. De hecho, puedes adquirir el libro aquí. También lo incluimos en la sección de teatro porque el día 14 de noviembre podremos asistir a una lectura dramatizada del texto en la Sala Berlanga.
Preludio:
Antes de meternos a la harina, un recordatorio: la obra la escribió Laura Aparicio bajo la supervisión de María Velasco (Ganadora del Max 2022 como mejor texto teatral por Talaré a los hombres de sobre la faz de la tierra y que próximamente estará en la cartelera del Festival de Otoño con Amadora, en un montaje creado al hilo del nuevo disco de Tulsa) en un laboratorio de escritura dramática.
El texto forma parte del ciclo de lecturas dramatizadas de la Sala Berlanga tras hacerse con el IV Premio SGAE de Teatro Ana Diosdado para textos escritos por mujeres 2022, y en su justificación, el jurado presidido por por Ruth Gutiérrez (ganadora del mismo certamen en 2021), ha dicho lo siguiente: «Rebosa teatralidad y complejidad, y apuesta por un lenguaje performativo y una narrativa fragmentada muy sugerentes que la alejan de los códigos escénicos tradicionales».
Sobre el texto
Laura Aparicio nos enfrenta a un mundo en el que las personas están sufriendo una serie de mutaciones equinas. La epidemia, además, ha sumergido al mundo en una ola de violencia y fanatismo entre híbridos y humanos. Con esta papeleta, la autora nos sumerge en la historia de una mujer que dirije un circo en las afueras de una ciudad, un padre dispuesto a sacrificar a su hijo para «crear mito» y un hijo gestado en maternidad subrogada que decide buscar a su madre.
Sobre su texto, Laura Aparicio ha dicho: «En estos tiempos tan oscuros, ante la angustia de vivir en esta sociedad, hay dos opciones de personarse en la vida: no ver, no pensar e intentar una huida hacia delante; o poner luz en esas zonas donde la injusticia impera a sus anchas». Ante tal situación —todo el mundo habla de los tiempos revueltos—, Aparicio apuesta por «un teatro como lugar de encuentro, donde cuestionarnos todos los puntos de vista. Un teatro en el que haya una revolución de la palabra y que nos traiga, como dice el dramaturgo Juan Mayorga, a los ‘seres deseantes’, la dignidad. Quizá sea hora de afinar los imaginarios para promover una nueva línea de acción; añadir al término bélico de ‘teatro combativo’ el de teatro de la vida, del riesgo, de hacer presente lo ausente, donde el lenguaje es el asunto político más importante, junto al humor».
El humor forma parte de esta propuesta en la misma medida que la intensidad de lo relatado —como guiándose por la máxima de Nietzsche que reza que «El hombre sufre tan terriblemente en el mundo que se ha visto obligado a inventar la risa». Según la autora: «El germen de la obra fue una distopía indirecta, aunque, en este tiempo que vivimos, más bien ha tomado el camino hacia la ucronía, sin perder los paralelismos con nuestra sociedad occidental actual, y en la cual están reflejados el machismo, la homofobia y el racismo».
«Del oso las yemas» de Javier Ballesteros
21.11.2023/19.30 h. Sala Berlanga. Madrid. 3,50€. https://cine.entradas.com/cine/madrid/sala-berlanga/sesiones?date=2023-11-21
El 19 de octubre Javier Ballesteros hablaba para teatromadrid.com de este texto, aún sin finalizar, porque le faltaba un cuarto de hora, o lo que es lo mismo, el bendito final. Llega a la Sala Berlanga en forma de lectura dramatizada el 21 de noviembre (19.30 h), como un estreno absoluto en el que participarán sus compañeras de Mujer en obras Pilar Bergés, Matilde Gimeno, Violeta Orgaz y Bárbara Santa-Cruz.
Ballesteros fue el ganador a la mejor Autoría Revelación y Mejor Espectáculo Revelación en 2023 con Cucaracha con paisaje de fondo, por tanto, ahora la presión está sobre esta nueva propuesta que reune misterio, monjas asalvajadas, maternidad y futuro.
Sobre Del oso las yemas tenemos un enorme enigma. En la entrevista antes mencionada, Javier Ballesteros habla de una monja embarazada de un tardígrado, un organismo que sobrevive miles de años y al que los científicos llaman «osito de agua». En el monasterio, las monjas han decidido criar a esta criatura en el silencio, fuera del tiempo, como solución al fin del mundo. Ballesteros les llama brujas o monjas asalvajadas, que en su intención de renunciar al conocimiento, terminan por olvidar cómo se construyen los pensamientos y deconstruyen el lenguaje (quizás es un nuevo homenaje a Gabriel García Márquez y el episodio en el que la familia Buendía no duerme y termina por olvidarlo todo), lo que genera la creación de textos inteligibles (un papelón para las actrices, seguro). Por su parte, la Fundación SGAE nos habla de una reflexión en torno al miedo. Añadimos, que según la entrevista, es el miedo que provocan las mujeres y que dice Ballesteros, explica el por qué los hombres nos llamaron brujas y nos quemaron en las hogueras.
A estas alturas de la lectura, el barullo será brutal. Esa es la magia del nuevo teatro (y de la nueva narrativa en todas sus vertientes), que convierte la experiencia en un puzle que cobra forma, no en base al argumento lineal o la lógica del texto, sino a través de la inteligencia —como capacidad de atar cabos— del receptor. Y aquí viene más lío: es una obra sobre la maternidad como metáfora para hablar del futuro, es una obra sobre brujería, es una obra con terror y suspense… Y en serio, con todo este puturrú, a mí me entran ganas de verla, porque en base a nuestro conocimiento de las propuestas de Mujer en obras, Ballesteros no es como Murakami, es un decente dramaturgo (y escritor) que termina lo que empieza y todo cobra sentido.
«Mambrú volvió de la guerra» de Carlos Labraña
25.11.2023/17.30 h. Sala Berlanga. Madrid. 3,50€. https://cine.entradas.com/cine/madrid/sala-berlanga/sesiones?date=2023-11-25
La Fundación SGAE otorgó a este texto su XXIII Premio de Teatro Infantil, y entre los argumentos con los que justificaba la elección decía «por su trasfondo de reconocimiento a la memoria histórica y a todos aquellos olvidados en cunetas y tapias de cementerios». Que en la tradición de considerar a los niños y niñas imbéciles, pues no funciona, pero teniendo en cuenta que Carlos Labraña está curtido en la escritura de textos infantiles, podemos intuir por dónde van las mimbres. Otro dato interesante: fue la primera obra en lengua gallega premiada por la SGAE.
De Labraña son O valo, la historia (sobre el drama de las personas refugiadas) de dos niños: uno soldado, que pone una bandera para marcar la frontera y una niña que intenta convencerlo de que la deje pasar, también A pequena compaña, sobre el abuso infantil, o Estrelecer, un reclamo feminista que formó parte del Ciclo de Lecturas dramatizadas de la SGAE en 2019. Por tanto, es un dramaturgo especializado en tratar en teatro para niñas y niños, temas comprometidos y sociales y que en su haber tiene premios como el Xeración Nós, el Estornela, el Manuel María, el Plata, o el Facho.
Y nos centramos en Mambrú volvió de la guerra. La lectura dramatizada dirigida por Gonzala Martín Scherman (directora de Factoría Teatro) tendrá lugar el 25 de noviembre y correrá a cargo de Lola Manzanares y Andrés Requejo y será el debut de Sara Rivas.
Ahora es cuando llegamos a la parte de explicar cómo se hace una obra infantil sobre temas tan adultos y calientes como la memoria histórica y para ello os contamos el argumento: Una niña está deseando estrenar el parque infantil que acaban de abrir en su pueblo. Ya allí, mientras juega, por casualidad encuentra un soldado de porcelana enterrado, que le cuenta que él vivió en ese pueblo hace muchos años… tantos, que no recuerda ni su nombre. La niña tiene un misterio entre manos, y con ayuda de su familia se esfuerza en descubrir la historia de ese soldado para que sepa quién es, de dónde viene y qué hace en ese lugar. El final, advierten desde la SGAE, es emocionante.
Otro dato: De casi todas las obras de Labraña hay un libro que rápido se convierte en un clásico de la literatura infantil y juvenil. En el caso de Mambrú volvió de la guerra, está editado por Anaya y la Fundación SGAE y puedes adquirirlo aquí: https://fundacionsgae.org/publicacion/mambru-volvio-de-la-guerra/
«Primera Sangre» de María Velasco
28.11.2023/19.30 h. Sala Berlanga. Madrid. 3,50€. https://cine.entradas.com/cine/madrid/sala-berlanga/sesiones?date=2023-11-28
Reconozco que he idealizado a María Velasco. La imagino en 2020 explicando a su interlocutora —en el papel coloco a Miren Iza, Tulsa— que ella solo hace teatro para cambiar el mundo, que quiere expresar a través del drama todo eso que ve, siente y presiente, para ayudar a la prójima. Y pienso que se merece lo que le está pasando. Talaré a los hombres de sobre la faz de la tierra —que mucho le debe a Laia Manzanares—, con el Max a la mejor autoría y el Premio Internacional Heidelberger Stückemarkt, sitúa a María Velasco en un puesto de salida avanzado en esto de las dramaturgias (me parece que las mujeres en la cultura siempre están en la salida, casi nunca a mitad de carrera y en la meta, nunca).
De aquellos lodos vienen estos barros. Lo de situarle con Tulsa en una supuesta escena tiene que ver con el estreno de Amadora en el Festival de Otoño, una propuesta que sirve para poner en gira un disco —que en ExPERPENTO hemos escuchado y nos tiene en shock— de una forma muy distinta (y humana).
Primera sangre ganó el XXXI Premio SGAE de Teatro Jardiel Poncela. Puedes hacerte con el libro aquí. El día 28 de noviembre (a las 19.30 h.) llega en forma de lectura dramátizada a la Sala Berlanga en una propuesta dirigida por Judith Pujol e interpretada por Paula Ortiz, Almudena Salort, Mariona Lucas, José Emilio Vera. Y no hará falta esperar mucho para verla en forma de montaje: será a finales de abril y parte junio que llegará a las tablas del Teatro Valle-Inclán dirigida por ella misma e interpretada por María Cerezuela, Javiera Paz, Vidda Priego, Francisco Reyes y Valeria Sorolla.
Con Primera sangre, María Velasco se refiere, según una entrevista de la revista Godot, a la primera regla y también a la sangre de un asesinato. En su campaña para presentar la nueva programación, desde el Centro Dramático Nacional usaron la palabra «miedo». En la sinopsis leemos: «A medio camino entre el memorial y el documento, el thriller y el cuento de fantasmas, la autoficción (…) obliga a la reflexión en torno los abusos sobre la infancia que se escriben en el cuerpo de las mujeres. Con lirismo (la poesía como llave) y rotundidad, Primera sangre nos invita a recuperar la memoria de las que ya no están para multiplicar nuestra existencia». Y María Velasco explica: «Laura —es una niña real— volvió a vivir en mí después de treinta años muerta, cuando una amiga de la ciudad en la que nací me dijo que estaba embarazada de una niña. Aunque empecé a escribir Primera sangre a raíz de esa noticia, siempre albergué un recuerdo nítido de la foto de Laura: ese cartel, SE BUSCA. Tenía la misma edad que ella, la niña desaparecida (luego asesinada) y estaba aprendiendo a distinguir lo conocido de lo desconocido y el temor de la temeridad, como el verde del rojo. Toda mi pubertad basculé entre estos polos, hasta hacer muy mío eso que Hölderlin expresa sublime: `Donde está el peligro, crece también lo que salva´».
El de María Velasco es teatro necesario. En lo que ya conocemos de su teatro, la escenografía, las actrices, la música, el contexto etcétera, tienen un peso tan fundamental como la propia literatura y el argumento. Así que tenemos una oportunidad única y muy excepcional para acercarnos a Primera Sangre, primero a través del libro, después a través de esta lectura dramatizada de la Sala Berlanga y por último, a través del montaje.