Entrevista de Reyes Muñoz
Fotografía cortesía de David Maldonado
.Polar pasó por el estudio y dejó para los anales de la historia de ExPERPENTO, un concierto emocionante. Para rodar menos de quince minutos, Alberto, Dani y Sergio estuvieron cerca de tres horas toqueteando la mesa, ensayando, e intuyo que divirtiéndose con la música, que es el pegamento de una banda de rock. Personalmente, no tenía ni idea de lo que pretendían. Pero cuando se encendieron los focos, las cámaras y pusimos a grabar el sonido, surgió la magia de tres temas que salieron del tirón: “Sundress”, «Astronauts» y «The night you thought you’d miss it all».
A Dani se le hizo tarde y no se quedó a la entrevista. Y ahí estaba yo, con Alberto y Sergio, y un cuestionario que no sabía por dónde agarrar, porque estaba preparado en base a un disco de título luminoso —A lighthouse that wants to be—, con un sonido oscuro, apretado y energético.
En breve podrán hacer conciertos en grandes escenarios, con mucha gente y bailes atrasados. Pero de momento, .Polar es de las pocas bandas que se han planteado aprovechar esta situación rara, para hacer del directo algo íntimo que cala hasta los huesos. Fue un placer trabajar con ellos y es una pena no ser de la Rolling Stone: su #ExVITA rondaría el millón de visualizaciones. Nos quedamos con lo positivo: somos ExPERPENTO y somos plataforma y un imán de bandas como .Polar, que entienden la esencia de la música. Y una banda que sabe de eso, tiene de techo el cielo.
ExVITA DE .Polar:
Disco A lighthouse that wants to be: https://dotpolar.bandcamp.com/album/a-lighthouse-that-wants-to-be
La verdad es que yo me había preparado la entrevista para lo que tenía escuchado del disco y después de lo que he visto aquí, pues… que las preguntas han perdido el sentido… ¡Parecen otras canciones!
Alberto: Yo creo que tampoco han cambiado tanto. Quizás el disco sea un poco más oscuro.
Sergio: Queríamos que lo de hacerlo en acústico supusiera también algo. No queríamos que esto fuese llegar a tocar lo mismo, con desenchufado y ya.
Alberto: No sé hacer eso. Yo no sé hacerlo.
«En un faro, que es lo que da el título al disco, tú solo ves luz abrasadora o solo ves oscuridad absoluta».
El sonido del disco es oscurote, vosotros os presentáis como una banda de hardcore. El título del disco es muy luminoso… A lighthouse that wants to be… Y aquí hemos visto un sonido con mucha luz. ¿De dónde sale todo esto?
Alberto: Yo creo que a nosotros nos gusta mucho jugar con los contrastes, ¿no? En un faro, que es lo que da el título al disco, tú solo ves luz abrasadora o solo ves oscuridad absoluta. Y en eso está un poco inspirada toda nuestra música. Yo creo que nuestras canciones pueden parecer oscuras, puede parecer que tienen un sonido asfixiante incluso, pero siempre hay un huequito para la esperanza o para sacar algo, o para crecer.
La formación ha cambiado estructuralmente. No sé si las nuevas llegadas hacen que cambie el sonido.
Alberto: Yo estoy desde siempre, monté el grupo con Álvaro, que es el batería. Lo montamos hace mucho y Sergio, a lo tonto, que parece de los novatos, lleva ya casi dos años en el grupo…
Sergio: Dos años y pico ya.
Alberto: ¡La virgen! ¿Más de dos años ya?
Sergio: Sí. Más de dos años.
Alberto: Pues los cambios… no han influido tanto en el sonido. Un grupo requiere muchísima energía, muchísimo compromiso y es complicado encontrar compañeros de viaje. Por suerte ahí están Sergio y Dani, que son las nuevas incorporaciones. Ya hemos dicho que esta formación lleva ¡más de dos años! ¡ya!
Sergio: Pero siempre se nota cuando hay un cambio. Cada uno incorpora su matiz más personal. La verdad es que lo más importante ha sido eso, conseguir que encajásemos los cuatro personalmente y de ahí despegar el proyecto.
¿Ya había más personas antes o .Polar era un dúo de Álvaro y Alberto?
Alberto: Mira, hemos tenido dos guitarristas más y ¿tres bajistas más? Algo así.
Sergio: Había una verdadera maldición con los bajistas.
Alberto: Un poco, sí, hubo una maldición de bajistas… un bajista que creció y subió de nivel a guitarrista… (mira a Sergio y sonríe). Pero bueno, a la larga, las relaciones en una banda de música son como las relaciones de la vida: amistades que vienen y van, pues había miembros del grupo que venían y se iban. Un grupo es una relación entre cuatro personas. Si algo no funciona, es mejor partir caminos.
«Creo que es una canción («Astronauts») que muestra bastante bien el proceso que ha pasado el grupo en general».
¿Para cuándo estaba planeado que saliera el disco? ¿Para este febrero?
Alberto: Estaba planeado para… ¡febrero del año pasado!
Sergio: Cuando ya teníamos entre ceja y ceja ponernos con ello, el último cambio de formación nos sorprendió un poco. Y luego pues con todo lo que hemos estado viviendo, como que todo el mundo veía difícil que fuese el momento para sacar un disco. Pero es que ya hacía falta.
Alberto: De repente lo vimos claro. De repente dio una vuelta. Antes teníamos unas canciones que nos apetecía grabar y después como que le encontramos el sentido al disco y cada vez fue creciendo más y lo grabamos en septiembre de 2020. Luego tardamos un poquito en sacarlo, pero en septiembre de 2020 ya sabíamos que estas canciones eran un disco y que en algún momento íbamos a acabar sacándolo.
Es sorprendente que «Astronauts» sea previo al apocalipsis.
Alberto: «Astronauts» es de 2018. Creo que la escribí en ese año. Pero es que luego cambié la letra un poco y fue metamorfoseándose… Pero sí, al final es curioso cómo parece que predices las cosas antes de que te pasen o cómo las cosas cambian el significado de las canciones con el tiempo. O cómo cambiamos nosotros…
Sergio: Creo que es una canción que muestra bastante bien el proceso que ha pasado el grupo en general. Cómo hemos tenido que llegar los cuatro para que la canción, que llevaba ahí mucho tiempo, de verdad, diese un paso adelante y estuviese preparada para el disco.
Va cambiando el estribillo.
Alberto: Sí, tiene la misma estructura pero la letra cambia todo el rato. La letra primero habla de alguien en segunda persona del singular, luego habla en primera persona del singular y luego habla en segunda persona del plural. Porque todo «Astronauts» habla de una relación y sobre cómo las diferentes etapas o las diferentes personalidades pueden afectar a esa relación. Entonces yo creo que la canción evoluciona por lo que estábamos hablando antes. La canción evoluciona igual que evolucionan las relaciones, ya sea de pareja, ya sea de amistad, ya sea en un grupo. Es ese un poco el fondo. Esos son los astronautas, en cada momento, cada uno es uno y parte de la relación.
¿»Sundress» es la primera que habéis tocado?
Alberto: Sí, es la primera que hemos tocado.
Jo, es que ¡cómo cambia! ¿Es en el disco la de la intro larga instrumental, muy cañera?
Alberto: Pero la intro la hemos tocado igual que en el disco, con las guitarras…
Sergio: Es que ha sonado totalmente distinta al entrar. Entra súper cañera en el disco. Es quizá el momento en el que el disco tiene el sonido más, más excesivo, casi oscuro. Así que al cambiarlo aquí a la guitarrita desenchufada… Yo también la he notado muy distinta.
Alberto: Está cambiada la armonía, está rearmonizada.
Sergio: Ha cogido una personalidad totalmente distinta.
Alberto: Cuando nos planteamos hacer acústicos, también decidimos darle una nueva vida a las canciones. No queríamos tocar la misma canción con las guitarras desenchufadas. Queríamos que fuese una versión. Y que la nueva versión te enfocase quizás otro punto de vista o a un detalle, algo en lo que a lo mejor no te fijas en la grabación original. Queríamos hacer algo que diese a las canciones otra personalidad.
Sergio: Además hay que pensar en la atmósfera de un unplugged, que es muy personal, muy íntima. Pues esta propuesta invitaba un poquito a hacer esa transición.
«»Sundress» es el momento en el que se presenta el concepto del disco. Se menciona el faro y es una canción muy importante, líricamente, dentro de todo el disco, que ata muy bien el concepto».
Ahora vamos a hablar de «Sundress» en el disco, que es una montaña rusa. También me ha parecido que es como una canción resumen del sonido del disco.
Sergio: Sí. De hecho, «Sundress» es la primera que compusimos los cuatro. Hay mucha parte de los cuatro juntos.
Alberto: Claro, había mucha parte del disco que estaba compuesta antes de que entrase Dani. Es graciosa la historia de «Sundress», porque yo al principio la concebía en acústico y ni siquiera pensaba que iba a ser una canción para el grupo. Tenía el estribillo y me acuerdo de enseñárselo a Álvaro, que es el batería. Y él me dijo “tío, ya, esa la tenemos que tocar, la tenemos que hacer todos juntos”. Y la verdad es que fue un poco… «Sundress» es el momento en el que se presenta el concepto del disco. Se menciona el faro y es una canción muy importante, líricamente, dentro de todo el disco, que ata muy bien el concepto. Entonces, evidentemente tenía que ser el single y es eso, es el resumen de lo que estamos haciendo ahora mismo, la dirección que queremos tomar.
«Es muy agradable que la gente entienda la letra».
Os habrán preguntado mil veces por qué en inglés… Lo siento, de veras…
Alberto: A ver, unas cuantas veces, sí. Es que yo cuando empecé a escribir, cuando tenía quince o catorce años, toda la música que a mí me gustaba era en inglés. Entonces eso se debe a la falta de referentes, que es súper importante. Yo solo concebía el tipo de música que a mí me gustaba en inglés y ha sido hace poco cuando he empezado a descubrir un montón de grupos españoles que cantan en español y que escriben en español muy bien, como Catorce, Viva Belgrado… Hasta ahora no me he atrevido a escribir una canción en español. Nuestra primera vez en castellano se llama “Lux”. El castellano, al final le da un matiz diferente, le da una sonoridad diferente. Es un territorio a explorar bastante guay y en el futuro, ya no nos cortaremos.
Sergio: Es un experimento que queríamos hacer y la verdad es que estamos bastante contentos con el resultado.
Alberto: Es muy agradable que la gente entienda la letra.
«Si las canciones cambian para nosotros, ¿por qué no van a cambiar un poco para todos?»
De verdad que sigo alucinada con lo que ha pasado aquí. Lo de «The night you thought you’d miss it all» ha sido muy emocionante. “Astronauts”, también. Escuché el disco y tenía un poco de miedo a que los vecinos nos aporreasen las paredes.
Alberto: Yo es que soy muy fan de reescribir mis canciones y reinventarlas. Las canciones no son grabados en piedra, siempre hay algunas cosas que tú vas tocando y que cambian para ti el significado y que transforman tu forma de ver la canción. Entonces el acústico es una excusa muy buena para darle una nueva piel a todas las canciones.
Sergio: Las letras de todas las canciones han cambiado una y mil veces antes de llegar al disco. Hay muchos arreglos que están totalmente descolocados respecto a lo que pensábamos en primer lugar. Llevar las canciones al acústico nos facilita mucho ese proceso, que ya es una metamorfosis. Para nosotros es fácil y no podíamos quedarnos quietos, teníamos que darle un toquecito.
Alberto: Nos gusta. Si las canciones cambian para nosotros, ¿por qué no van a cambiar un poco para todos? ¡Es que yo soy un rayado para la armonía! Y eso mola. Mola que una canción también se sienta natural con otro traje, en este caso, en acústico.
Sergio: No ha sido un proceso complicado, ha sido muy natural. No está nada forzado.
Alberto: Es que yo compongo un montón con la acústica. La mayoría de estas canciones nacieron acústicas. La cosa es que no sé… el volumen, la intensidad no es igual. Si ahora te canto “Sundress”, como está en el disco, es que no va a ser lo mismo. No es lo mismo porque no me puedo mover, no puedo saltar, no puedo… es una energía diferente, pero el significado es el mismo. Simplemente tienes que cambiar un poco cómo transmitir esa energía.
Al final solo cambian las herramientas. Es como si dibujas la misma cosa con un lápiz o con pinceles. Pues va a cambiar, evidentemente. Abrázalo, acéptalo y ve a por eso todo lo que puedas, en vez de intentar agarrarte a lo primero todo lo posible. Ese es mi punto de vista, al menos.