Anna Castillo en «El olivo» de Icíar Bollain


Entrevista de Diego Yturriaga

Seguramente estarás harto de ver olivos en rotondas y plazas de ayuntamientos. Icíar Bollaín (Flores de otro mundo, Te doy mis ojos, También la lluvia…) nos invita a un drama algo quijotesco y algo road movie en torno a un olivo milenario que se vende como elemento decorativo, una metáfora destilada de la crisis.

La idea surge cuando Paul Laverty (colaborador de Ken Loach) lee sobre una historia parecida. Hay en este filme mucha fuerza y mucho sentimiento. Las actuaciones son estupendas: empezando por Manuel Cucala al que vio Bollaín bajándose de un tractor cuando decidió que fuera el abuelo del filme. O Javier Gutiérrez, que lleva muy bien ese papel de Sancho Panza que ha perdido tanto tras la vorágine inmobiliaria.

Pero quien realmente lleva el ímpetu de esta historia es Anna Castillo, con quien hablamos por teléfono.

¿Cómo es trabajar con Icíar Bollaín?

Muy fácil. Icíar es una mujer muy inteligente y sensible, se nota que ha sido actriz y durante el rodaje me cuidó muchísimo, me escuchaba, estaba pendiente de mí. Me daba mucha confianza y eso me ayudó muchísimo. Aparte estaba muy abierta a todo lo que le pudiéramos proponer, eso lo hacía todo más fácil. A la vez tiene las cosas muy claras. Te sientes muy segura, muy a gusto durante todo el rodaje. Estaba un poco asustada cuando me eligieron porque era mucha responsabilidad y la verdad es que me pareció facilísimo rodar con ella.

¿Cómo eres de parecida a Alma? ¿Tuviste que buscar mucho?

Alma es muy distinta a mí, pero cuando la leí me emocionó muchísimo, es un personaje con el que sin querer conectas. Puedes entender sus sentimientos. A la hora de entender el personaje, lo que hice fue hablar mucho con Icíar para entender a Alma. Y una vez la entendí fue muy fácil conectar con ella. Yo soy muy expresiva y ella no, ella es muy introvertida, se lo calla todo, tiene esa cosa de contener y contener. Eso me distanciaba de ella pero a la vez es un personaje tan valiente y luchador que sentía muchísima admiración por ella. ¿Sabes lo que te quiero decir? Es una tía tan luchadora y tan fuerte que dices: ¡Claro que sí! ¡Esto es lo que yo quiero ser!

“Es inevitable que si haces un personaje no dejes de ser tú en ciertos aspectos. Tiene muchas cosas mías pero tuve que entender a Alma para interpretarla”

En la película hay un momento catártico donde Alma se pone a reír, supongo que tú eres más así como persona…

Es inevitable que si haces un personaje no dejes de ser tú en ciertos aspectos. Tiene muchas cosas mías, pero como decía, tuve que entender a Alma para interpretarla.

La relación más estrecha que hay en esta película es la de Alma con su abuelo –Manuel Cucala–, ¿cómo ha sido esa relación?

Cualquier amor que sea incondicional mueve montañas. Lo que le pasa a Alma es que su abuelo es su base, su pilar, la persona que más quiere en el mundo… y haría lo que fuera por él. Y la verdad es que me fue muy fácil entender eso, porque todos tenemos amores incondicionales. Y Manuel Cucala era increíble: ese señor de pueblo, maravilloso… te lo hacía todo más fácil.

Supongo que no te ha sido difícil hacerte con el acento de Castellón siendo de Barcelona…

De hecho yo siempre he veraneado en un pueblo al lado de donde estuvimos grabando.

Aparte de Castellón, fuisteis a grabar a Dusseldorf. ¿Cómo ha sido el trabajo y la convivencia en la carretera?

Yo tenía miedo de no poder dar abasto. Fueron dos meses de currar todos los días pero estuvimos muy a gusto. Currábamos, pero como todo el mundo. Nos fuimos a Alemania tres semanas, toda una experiencia, y lo pasamos muy bien. Fuera de casa haces piña, comes siempre juntos y tienes muy buenos ratos. He tenido los mejores compañeros de viaje que podía tener.

¿Es muy perfeccionista Icíar?

Icíar graba mucho, pero no te obliga a llegar a algo en concreto. Le gusta buscar, sorprenderte, graba muchas tomas para ver qué pasa, se permite jugar, le gusta ir encontrando cosas. Igual Icíar es muy exigente, pero con ella misma. Yo nunca sufrí presión por su parte. Ella tenía muy claro qué quería decir y la manera de encontrarlo era darse el tiempo que hiciera falta para encontrarlo. Eso para un actor es una gloria bendita.

“Igual Icíar es muy exigente, pero con ella misma. Yo nunca sufrí presión por su parte”

¿Impone Icíar?

Impone lo inteligente que es pero es muy cercana y muy buena. Me imponía más antes de conocerla: la figura de Icíar Bollaín. Yo ya la quiero así que solo te puedo decir cosas buenas de ella.

¿Cómo ves tu profesión?

Siendo realista veo muy inestable esta profesión. Con muchas ganas de seguir currando y esperando que lleguen cosas guays. Con ilusión y esperanza.

¿Ahora en qué estás?

Ahora estoy grabando la nueva película de Agustín Díaz Yanes, sigo con la función de teatro La llamada. Seguiré así, trabajando todo lo que pueda, sin presión porque bastante presión tiene esta profesión como para que te la pongas tú mismo. Siendo feliz, así voy a seguir.

El olivo habla de la crisis. Crisis económica, de valores… supongo que llevarás casi toda tu vida oyendo hablar de ella. ¿Cómo lo ves?

No tengo conciencia de cómo eran las cosas antes de la crisis. Yo soy actriz y veo que afecta, pero es otro proceso. Lo veo más en mis amigos. Te cuentan que si estudias tendrás trabajo y puedes estudiar lo que haga falta que no te comes un rosco y te tienes que largar. Veo mucha frustración y al mismo tiempo mucha lucha, muchas ganas de cambiar las cosas. Quizás sea ilusa, pero creo que las cosas van a ir cambiando, muy poco a poco pero veo las ganas. A la vez también digo: ¡Joder, qué herencia de país nos ha tocado vivir! Es lo que le pasa a Alma, que dice: «¿de verdad habéis dejado esto así? Alguien tendrá que arreglarlo».

¿Eras consciente de lo que grababas? Icíar tiene una narración prismática, no va de un punto a otro sino que recoge diferentes puntos para contar la historia.

Sí, era consciente. Me leí el guion diez veces antes de rodar y hablé mucho con Icíar. Es cierto que en otras películas jugaba con el no contarlo todo a los actores. Sin embargo en El olivo fuimos todos muy conscientes.

Más información en: http://blog.rtve.es/elolivo/

En ExPERPENTO abril/mayo 2016: http://issuu.com/experpento/docs/experpento_abril_mayo2016_ok_lr/24?e=2897458/34886780

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