Modalidad RPG de gran complejidad. Lo primero que llama la atención son unos espectaculares escenarios en 3D. Sin embargo, al principio es como si nos pusieran el caramelo en la boca porque la acción es en 2D, con movimientos limitados a derecha e izquierda, y no puedes adentrarte más en esos escenarios trabajados hasta el más mínimo detalle.
Por suerte, las batallas sí se desarrollan en 3D, lo que nos permite situar a nuestros jugadores en cualquier punto del escenario. Si no estás acostumbrado a este tipo de juegos, puede resultarte un poco lioso: no sabes muy bien qué hacer, porque hay demasiados diálogos pero que realmente no te dan muchas pistas para saber cómo tiene que desarrollarse el juego. En cuanto al sistema de combate, es bastante complejo, con un importante componente táctico. Hay incluso un sistema por turnos, que indica mediante una barra medidora la cantidad de ataques que se pueden realizar por cada uno de ellos. Una novedad de este juego es la posibilidad de lanzar fotones a los enemigos, dejándolos cristalizados, bien para no enfrentarnos a ellos o bien para «utilizarlos» (pueden servir, por ejemplo, de herramienta para salvar un desnivel)
La historia cuenta cómo Silmeria, una valquiria, posee a la princesa Alicia para poder vengarse de Odín. La dualidad entre ambas desembocará en una evolución de la joven Alicia como guerrera, un cambio del que seremos partícipes a través del juego, tomando decisiones por ella, introduciéndola en el mundo de la magia y convirtiéndola en una experta luchadora.
Y todo ello, bajo el envoltorio de una banda sonora que se adecua perfectamente al juego
