Descargar ExPERPENTO 101 / Visualizar ExPERPENTO 101
Publicación: 11 de enero de 2022
Entrevista de Reyes Muñoz
Fotos (c) cortesía de Promos sin fronteras
Desde que en 2016 lanzaran su primer LP Mordiendo, Tremenda Jauría se vió abocada a un éxito irremediable. Durante casi cinco años se vieron sumergidas en un auténtico vendaval de conciertos, canciones, discos, vídeos, grabaciones… y de pronto llegó la oscuridad en forma de confinamiento. Todxs igual empezó a fraguarse entre paredes a pesar de que Tremenda Jauría se nutría de la calle. Pero ya está terminado y pronto lo podremos disfrutar en directo en la Sala la Riviera.
Quiero empezar con una reflexión. Resulta que en todas las entrevistas que he leído, os tenéis que justificar por hacer reguetón. Yo no me imagino a Joey Ramone explicando por qué hacía punk… Nunca te has planteado decir, “pues porque nos da la gana”…
Sí. Esa es la realidad. Lo que pasa es que cuando empezamos era un tema recurrente en todas las entrevistas y la verdad es que tampoco hacemos reguetón. Cuando se fundó la banda, teníamos que hablar todo el tiempo de ese tema. Yo flipaba, porque la pregunta estaba en todas las entrevistas: que si machismo y reguetón, que su reguetón y no sé que. Y lo que tu dices, que la respuesta correcta que no dábamos era: “porque es lo que queremos hacer”. Y tampoco hacíamos tanto reguetón. Influenciados sí que estamos, pero hacemos una especie de música electrónica, urbana, muy influenciada por el hip-hop, y también por el punk… estamos influenciados por un montón de géneros. Lo del reguetón era más que nada morbo periodístico.
Claro. Yo no os conocía y me puse a escucharos antes de leer nada sobre Tremenda Jauría. Y cuando me leí las entrevistas me chocó todo el tema del reguetón. A mí no se me había ocurrido, quizás porque no tengo mucha idea. Para mí sonáis a algo de hace veinte o treinta años… a Manu Chao o Amparanoia… Quizás no sois ni conscientes…
Pues la verdad, que yo creo que influenciados por Manu Chao o Amparanoia, poco. Venimos de la tradición del hip-hop, me parece. Ahí es donde nos sentimos más cómodas. Por un lado del hip-hop y por otro del punk, sobre todo a nivel discursivo. El concepto punk nos ha iluminado bastante, ha estado mucho en nuestra vida.
Dime que significa “malegría”. Es la palabra con la que habéis definido el sentir de “Cayena” y es una palabra que titula una canción de Manu Chao, supongo que ya lo sabes…
Sí, lo sé, pero no viene de ahí. Es una palabra que usamos mucho. Es la sensación de “ni estoy tan bien ni estoy tan mal”, o “qué mal estamos y lo bien que lo pasamos”. Somos de una generación que está cargada de inputs, y que a la vez tiene mucha adrenalina, mucha capacidad de tirar para adelante y enfrentarse a la vida… Por ahí va.
«Muchas veces priorizamos lo que no tiene que ver con la profesionalización y esto, en el contexto de la música, quizás nos ha dificultado algunas cosas. Pero bueno, es nuestra elección».
Leí algo que me pareció muy lúcido en una respuesta vuestra. No sé si respondías tú. Decíais que para vosotros hacer reguetón era como hacer punk. Es verdad, es el hazlo tú mismo y lo que lleva implícito, como lo de ponerse a tocar sin saber tocar… ¿Lo seguís viviendo así o ya váis sintiendo una profesionalización?
Sí. En estos años nos he profesionalizado mucho. Esto era un grupo de colegas sin ninguna pretensión. Después de cinco años rodando si que nos hemos dado cuenta de que ahora somos profesionales o trabajadores de la música. Hemos aprendido un montón. Pero en esencia, seguimos siendo las mismas que cuando empezamos, como decía Eskorbuto. Y esto es así para mal y para bien. Muchas veces priorizamos lo que no tiene que ver con la profesionalización y esto, en el contexto de la música, quizás nos ha dificultado algunas cosas. Pero bueno, es nuestra elección.
Vamos a hablar del autotune como concepto general de una forma de hacer música, porque en los temas más actuales noto un cambio. ¿La fórmula se agota? ¿O es algo a lo que no dais importancia en plan: “si aparece, que aparezca”?
Pues es algo a lo que no le damos importancia. Desde que empezamos hemos utilizado estas herramientas… Hay canciones en las que aparece mucho, otras en las que no aparece y otras en las que utilizamos otros efectos… Hoy en día es una herramienta más, como las guitarras eléctricas en el rock. Y seguramente, lo seguiremos utilizando si nos viene bien. Pero es verdad lo que dices. En el último disco hemos cambiado la estética en general, aunque aparece. Igual un día desaparece…
…
…
Del nuevo disco he escuchado “Cayena” y está ese cambio con respecto a otras canciones anteriores. Hasta en el videoclip está ese cambio del que hablas. Y la duda es si es la canción rara del disco o sirve de carta de presentación.
Es la carta de presentación del disco. El disco es mucho más oscuro que “Cayena”, que es la canción más fresquita y por eso la sacamos de single. Es más oscuro tanto en la temática como a nivel musical y “Cayena”, que sí presenta el disco, es la canción con más luz del disco. Hay alguno más que también es luminoso, pero están acompañados de canciones muy oscuritas.
«Lo social siempre está. Es algo que forma parte de nuestra vida y de Tremenda Jauría. Entendemos la vida desde lo colectivo y esto está en el nuevo disco. Pero es verdad que quizás no es tan explícito y no lo es porque lo contrario sería engañar».
Creo que en el confinamiento ha habido un cambio que no solo es estético, como que os habéis ido moviendo de lo social a lo íntimo.
Lo social siempre está. Es algo que forma parte de nuestra vida y de Tremenda Jauría. Entendemos la vida desde lo colectivo y esto está en el nuevo disco. Pero es verdad que quizás no es tan explícito y no lo es porque lo contrario sería engañar. Por un motivo que has dicho tú: y es que llevamos dos años encerradas en casa. Hablar de cosas que no nos pasan no es muy natural. Antes nos pasaban un montón de cosas que tenían que ver con lo de afuera y las queríamos contar y estos dos años han sido de vivir otro tipo de experiencias, por las limitaciones de la propia pandemia. Lo natural, por tanto es irnos a contar cosas más íntimas.
Tuvisteis un par de años muy frenéticos, muy concentrados. Y llega la pandemia. ¿Contáis esos dos años como parte de la historia de Tremenda Jauría? Sí que habéis hecho cosas, como lo de los “Directxs al Colapso” .
Cumplimos cinco años justo en pandemia y los “Directxs al Colapso” fue la manera de celebrarlo. Hicimos un concierto en streaming, lo grabamos y lo pusimos en youtube para que la gente pudiera disfrutarlo y eso. Es una especie de recopilatorio de los temas que hemos tocado en directo, los que se han ido quedando de todos los discos.
…
…
¿El disco nuevo sale del confinamiento? ¿O es posterior? ¿O anterior?
Es una mezcla. Es verdad que empezamos en el confinamiento, pero nos costó arrancar que te cagas. Nos faltaba la inspiración por todos los lados. Para nosotras fue un palazo, porque las canciones se nutrían de lo que pasaba en la vida y en la calle, en relación con todo lo de fuera… Arrancamos a mitad del confinamiento.
Por eso te preguntaba si estos dos años cuentan para vosotros. La historia de Tremenda Jauría es corta, pero muy intensa. Y estuvisteis ahí arriba muy rápido y de forma muy intensa, supongo que hubo una sorpresa con eso, y cuando ya os habéis adaptado a la locura, portazo…
¡Y no solo fue un palazo por eso! ¡A nivel económico ha sido muy duro! Nos pilló en un momento en el que habíamos gastado todo el dinero en vídeos y cosas que teníamos pendientes y estábamos a punto de empezar la gira, así que entendíamos que íbamos a recuperar ese dinero. Y en ese momento de ceros en la cuenta, nos vimos encerradas en casa. Un jaelo.
También nos vino muy bien el descanso, porque habían sido cinco años muy intensos, de no parar. Volvíamos de la gira en latinoamérica, habían sido años de disfrutar mucho y no habíamos mirado atrás. Como te digo, empezábamos la gira y lo de descansar no lo habíamos planteado para más adelante, para trabajar en el disco nuevo.
«Hemos estado cinco años dando vueltas por todos los lados, dando conciertos, de viaje con colegas, culo con culo… Todo eso ha sido un regalo. Y lo que venga ahora…»
¿Os ha dado miedo esto de volver a empezar, de volver a arrancar y que no esté la gente ahí como antes de la pandemia?
Sí. Las cosas ahora van rapidísimo. No tenemos mucho arte con el tema de las redes y lo hemos notado muchísimo. La gente que tiene arte en las redes ha generado mucho movimiento… Y es que nosotras las tenemos ahí, medio muertas. Pero que quieres que te diga, todo esto que hemos vivido ha sido un regalo. Hemos estado cinco años dando vueltas por todos los lados, dando conciertos, de viaje con colegas, culo con culo… Todo eso ha sido un regalo. Y lo que venga ahora…
Pase lo que pase, tenéis una gran historia para contar a los nietos…
¡Vaya! Y la banda va a seguir aunque no tenga ninguna repercusión. Es un proyecto que hemos mimado tanto… es nuestro espacio de encuentro, es un espacio que nació para ser compartido… no sé como decirlo.
«Me gusta creer que como nos conocemos desde hace muchos años, somos capaces de hacer frente a cualquier crisis».
También está el peligro opuesto. Yo creo que sin ninguna duda váis a estar ahí, como antes… Pero el espacio de encuentro de unas colegas ha crecido mucho, y ahora funciona como una empresa, con una cuenta del banco de la que dependen muchas cosas…
El grupo surge de esa amistad, pero sé a lo que te refieres. Me gusta creer que como nos conocemos desde hace muchos años, somos capaces de hacer frente a cualquier crisis. Y sí que es verdad que de pronto, el grupo de colegas que no tiene más ambición que juntarse para hacer música y divertirse, de pronto se ve metido en situaciones que son de empresa. Sí que le hemos dado muchas vueltas a todo, sí que hemos tenido ese debate. Ya no somos nosotras solas, ahora hay un equipo muy grande implicado, hay técnicas de sonido, hay road manager, hay equipo de prensa… Las que fundamos la banda no vamos a discutir, somos amigas… pero a todas esas personas que hay alrededor, les ha costado más conciliar la situación.
…
…
¿Qué significa lo de los ojos de las fotos de promo?
Pues tiene que ver con que al principio queríamos que fuera una banda anónima, que no se supiera quiénes éramos. Nos parecía importante no personalizar y que todo se centrara en el mensaje de colectivo y no en nosotras individualmente. Para nosotras ese era el verdadero peligro que corrían otras bandas de música y por eso nos tapábamos la cara en las fotos… Y en este disco es el primero en el que salimos a cara descubierta.
Hemos charlado en torno a toda esa locura previa, en ascenso constante, sin parar ¿Sentis vértigo al mirar atrás?
Esto nos ha pasado, sí. En el confinamiento nos pusimos a ver vídeos de conciertos y flipábamos. Cuando estás en la cresta de la ola, no te das cuenta. Un día nos pasaron un video que alguien había encontrado. Era de un concierto de lo más emocionante, con todo el mundo cantando… y nos lo pasamos diciendo: “esta era nuestra vida hace nada”. No lo habíamos valorado, y así eran nuestros fines de semana.